PENSAMIENTOS EFÍMEROS
Nunca van solos sobre el suelo quebradizo
Ningún pensamiento llega solo. Toda idea que adquiere forma, nombre o rostro tiene su origen en algo: un hecho o sentimiento. Al pintar y diseñar sus Pensamientos efímeros, Guadalupe Reyes da voz a las emociones, recuerdos y experiencias que fueron semilla para volverse imágenes y objetos. Ella nos muestra en 17 obras pictóricas y joyería de diseño los pensamientos que nacen, habitan en la mente y esperan el momento indicado para irse.
Ningún pensamiento se va solo, porque para emigrar, una evocación primero debe hallar su propia identidad. ese rasgo único y que sobrepasa los muros o las fronteras. Hablo de pensamientos que viajan en dupla, tan opuestos como necesarios para distinguirse el uno del otro, como el amor y el desamor.
Guadalupe Reyes es una artista que grita y reclama, cuya obra no sólo hace visible la violencia irracional en la que estamos inmersos sino que busca anclar a punta de pinceladas para que la memoria no olvide la violencia, los feminicidios, las desapariciones, el Muro… Quizá por eso también ve en el color, las mariposas, los colibríes o la muerte los elementos idóneos para restaurar un corazón golpeado por la realidad.
Porque sólo el arte nos da esa libertad para expresarnos y vincularnos —por decirlo así— con un entorno desgastado. Sólo el arte es capaz de ofrecernos la dosis de esperanza y fe necesaria para reencontrarnos. Sólo el arte recupera la identidad de quienes siempre se mueven, de quienes hacen suya y enqriquecen una cultura y geografía distinta a la que vieron al nacer.
En la propuesta de Guadalupe Reyes está presente el anhelo de habitar un territorio sin fronteras (el cielo, quizá) porque sus pensamientos no son muy distintos a los nuestros, porque en cada trazo, lo efímero busca perdurar y clama justicia. Por eso sus joyas nos recuerdan la armonía y dureza del metal y de la piedra como símbolos de lo perdurable.
Hablamos de una muestra que contiene pensamientos convertidos en imágenes y joyas que hacen dupla con la poesía de Itzel Núñez y buscan, precisamente, derribar cualquier frontera con los espectadores, para que la interpretación de cada uno sea el territorio seguro adonde llegan (o el que dejan) quienes nunca van solos sobre el suelo quebradizo.
Selene Salas Sánchez
Ciudad de Zacatecas. Abril de 2017